Vivimos sumidos en el muy corto plazo. La velocidad a la que nos hacen vivir y aceptar los cambios, sin tiempo para la reflexión y adaptación, nos convierte en autómatas. Cada vez nos sentimos más afiliados a la «inteligencia artificial» (que no existe) porque hasta un cepillo de dientes la tiene (según nos venden). Si aceptamos lo inaceptablemente lógico, cómo no vamos a aceptar lo incomprensible para la mayoría de los humanos.
Categoría: La gran farsa sanitaria
El COLAPSO sanitario comenzó hace décadas: el término que mece la cuna
La única solución es una transformación radical del modelo, desde su estructura organizativa hasta el reconocimiento a los profesionales, pasando por un diseño asistencial por áreas de competencia teniendo en cuenta la proximidad a las personas
